Hemos vivido un complejo 2020, pero soy optimista y espero que esto nos anime a seguir avanzando en el desarrollo y diversificación de la industria regional, de la mano de la reactivación que se nos viene cada vez con más fuerza.

Si hablamos de energía, debemos comprender en su totalidad el potencial único en las renovables que posee Chile, posicionando a nuestra región de Antofagasta como la capital de la matriz energética, con una capacidad instalada de 6.302,38 MW, aportando un 24,10% a la matriz nacional. Cifras que no solo nos posicionan, sino que abren un abanico de oportunidades para las pequeñas y medianas empresas del sector que se vieron afectadas en este tiempo.

Es importante saber que, a diciembre 2020, existe un total de 27 proyectos de generación eléctrica, y, al iniciar construcción, se estima que la cantidad de mano de obra a requerir para esta etapa será de 7.051 promedio. Es por esto que, ahora más que nunca, necesitamos trabajar arduamente en generar oportunidades laborales para nuestros proveedores y es lo que hemos estado buscando junto a nuestro programa Clúster de Energía en su segundo año de ejecución y ahora comenzando el tercero.

El programa ha sido parte de talleres de compra con Engie y ENEL, ruedas de negocio con las empresa Gasco y la Asociación Industriales de Antofagasta (AIA) y la participación en el encuentro empresarial internacional junto a la Mesa Regional de Comercio Exterior y ZICOSUR, fomentando e impulsando la vinculación directa de los proveedores con la industria energética, entre otras diversas acciones.

Además, hemos realizado encuentros de negocios con Mainstream, donde se mostró el avance de la empresa y sus proyectos en la región, haciendo hincapié en los proyectos, avances y oportunidades para la industria energética.

Todo esto va de la mano con los más de 200 empresas proveedoras regionales que han sido identificados, caracterizados y que son parte de nuestra base de datos, a los que proporcionamos información de empresas mandantes que buscan servicios locales, entregando el perfil de las empresas y así contribuyendo a generar vínculos entre mandante y proveedores.

Pero, ¿cómo podemos garantizar el éxito si no formamos nuestro capital humano?  Es sensato entender la importancia de generar técnicos y profesionales calificado con las competencias y herramientas necesarias para enfrentar la industria. Bajo este contexto hace poco, finalizamos el curso de capacitación para instaladores y mantenedores fotovoltaicos, con el apoyo del Clúster de Energía y ejecutado por la Corporación Desarrollo Tecnológico (CDT), Universidad de Antofagasta y Codesser.

El programa benefició a 60 alumnos y alumnas de las comunas de Antofagasta, Tocopilla y Calama, contemplando cerca de 90 horas de capacitación, con el objetivo de fortalecer y preparar al capital humano regional, de cara a los requerimientos actuales y futuros de la industria energética.

Entendemos la importante labor que cumple nuestro programa Clúster de Energía, trabajando en una industria creciente y de avance rápido, y compañando a los que hoy enfrentan con incertidumbre el futuro. Es importante seguir conociendo las brechas que enfrenta el sector energético uniendo los grandes eslabones de la industria creando un reimpulso económico para nuestra región.