– En el Día Mundial del Agua, Gobierno y gremios firmaron un Acuerdo voluntario para promover y fortalecer la gestión corporativa del agua, así como reducir la huella hídrica, en los sectores productivos chilenos.

– Hay más de 150 empresas interesadas, de los sectores agrícola, minero, industria de alimentos procesados, comercio, vinos, retail, pesquero, tecnología y sanitarias, en participar en esta iniciativa que abre su proceso de adhesión este 26 de abril.

El Acuerdo de Producción Limpia “Certificado Azul”, de gestión público-privada impulsado por la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo y Fundación Chile, permitirá articular acciones con empresas de distintos rubros de la economía nacional en torno a la gestión integral y sustentable del recurso hídrico en procesos productivos y de servicios, en el plazo máximo de 36 de meses para la obtención de su máximo nivel de certificación.

A través de siete metas específicas, que involucran el uso de herramientas asociadas a la medición de huella hídrica, gestión de información y responsabilidad social del agua, jerarquizando prioridades e incentivando la inversión necesaria, se busca además mejorar la eficiencia, productividad y desempeño ambiental de lasempresas, permitiéndoles posicionarse como responsables, resilientes y comprometidas con su entorno

La firma del Acuerdo voluntario contó con la participación de Javier Naranjo, Subsecretario de Medio Ambiente, del vicepresidente de Corfo, Pablo Terrazas, del embajador de Suiza, Arno Wicki; del director ejecutivo de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Giovanni Calderón; del superintendente del Medio Ambiente, Cristóbal de la Maza, del gerente general de Fundación Chile, Marcos Kulka; del presidente de Sociedad Nacional de Agricultura, Ricardo Ariztía; del presidente de Sonami, Diego Hernández, del director general de Prochile, Jorge O´Ryan, del secretario general de Sofofa, Rafael Palacios y Gonzalo Bachelet, vicepresidente de Chilealimentos.

En la oportunidad, la Ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt destacó que la iniciativa se enmarca en la nueva NDC presentada hace casi un año en la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático y se complementa con el programa Huella Chile. “En Chile tenemos un enorme desafío en la gestión del agua, pero sabemos que con un trabajo coordinado del sector público y el fomento de las alianzas con el sector privado y local, las iniciativas como el Certificado Azul se irán complementando con otras que se están desarrollando para contar con acciones concretas para hacer frente a la enorme crisis hídrica queafrontamos”, dijo la autoridad.

Pablo Terrazas, Vicepresidente de Corfo, afirmó que “nuestro país enfrenta importantes desafíos en torno al agua, por lo que esta colaboración público-privada es fundamental para enfrentar los desafíos actuales de la economía y para que como país avancemos hacia una reactivación sostenible, en lo cual estamos sumamente comprometidos desde Corfo. Todos, desde los distintos frentes, debemos ser capaces decontribuir a las metas propuestas, lo que sin duda ayudará a mejorar la competitividad y productividad de nuestras empresas en un entorno que cada vez exige fortalecer más el respeto al medioambiente”.

El Director Ejecutivo de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Giovanni Calderón, señaló que “esta iniciativa es un hito fundamental y se enmarca en la toma de conciencia de que el agua es un recurso escaso, y a la vez fundamental para el desarrollo de toda actividad productiva. Ese uso debe ser eficiente, muy racional, y estar fundado en las necesidades básicas. Para nosotros es un verdadero privilegio poder ofrecer este instrumento que es gradual en su aplicación, de manera de poder abarcar toda la cadena del sistema productivo”.

Por su parte, Marcos Kulka, Gerente General de Fundación Chile, aseguró que “el Certificado Azul representa una enorme oportunidad para que las empresas de los diversos sectores productivos den un paso significativo hacia una gestión sustentable del agua, aspecto de la más alta relevancia si se considera que una parte importante del territorio nacional -el 76%- atraviesa por una de las peores sequías de su historia. La pandemia mostró, aún más, la brecha que supone la falta de acceso al agua. Como Fundación Chile nos encontramostrabajando intensamente por la reactivación sostenible del país y la seguridad hídrica es un elemento clave”.

Gradualidad y colaboración

El Certificado Azul se basa en dos principios: gradualidad y colaboración. Todas las empresas, independientemente de su tamaño, pueden ser parte de este desafío, de manera progresiva. Asimismo, lasempresas pueden apoyar a sus proveedores para mejorar la gestión del agua.

Mediante este instrumento las empresas se comprometen también a implementar un plan de valor compartido en los territorios en que están insertas, relacionados con los impactos de la huella de agua.

En el acuerdo voluntario participan el Ministerio del Medio Ambiente, Superintendencia de Medio Ambiente, Dirección General de Aguas, INDAP, Corfo, Prochile, Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático,Chilealimentos, Sofofa, Asimet, Sociedad Nacional de Agricultura y Sociedad Nacional de Minería.

El Acuerdo se gestó en el marco del proyecto SuizAgua del Programa Latinoamericano “El Agua nos Une” y está alineado con el ODS 6 de la Agenda 2030 establecida por la ONU, que indica garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y el saneamiento para todos, así como con el ODS 17, relacionado con el fomento de la cooperación público privada para alcanzar los otros 16 ODS.

En este trabajo conjunto se aplicará la herramienta Huella del Agua (ISO 14.046) para identificar y reducir en al menos un 5% los impactos de los principales puntos críticos y el diseño de acciones para bajar el uso del agua. También, se implementarán prácticas de eficiencia hídrica y medidas de reducción en las cadenas de producción.

Por otro lado, el Servicio de Impuestos Internos acogió el reconocimiento como gastos deducibles de la renta a aquellos incurridos en el proceso de certificación del Certificado Azul, marcando un cambio relevante en la forma como las empresas participan en la gestión del agua en Chile, fomentando la inversión público-privada de soluciones hídricas internamente en sus procesos, pero también en su cadena de proveedores y el entorno.