- ¿Dónde estamos y para dónde vamos? ‘Norte y Energía’ entrevistó a académicos, especialistas, miembros de los gremios y autoridades relacionadas con la temática abordada.
La pandemia de covid-19 ha paralizado la economía del mundo entero, de eso no hay duda. El Producto Interno Bruto (PIB) mundial sufrió en 2020 su caída más pronunciada desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Por otra parte, millones de personas quedaron desempleadas o sus puestos de trabajo fueron suspendidos. Producto de lo anterior, la mayoría de los gobiernos del orbe aumentaron la inversión pública e inyectaron billones de dólares en sus economías; a objeto de evitar una crisis aún mayor.
En este contexto, y según indicó a la BBC Mundo Steve Schifferes, investigador honorario del Honorary Research Fellow del Centro de Investigación de Economía Política de la Ciudad de Universidad de Londres, “la recuperación de 2021 es muy incierta”.
El experto señaló que “la economía de China está creciendo con fuerza nuevamente, pero es posible que muchas de las naciones más ricas del mundo no se recuperen por completo hasta 2022, considerando una estimación temprana”.
Como es de esperar; la velocidad con la cual las naciones puedan contener el azote pandémico –considerando las medidas establecidas por las autoridades de cada país y los procesos de vacunación-, tendrá un gran impacto en el desempeño de la economía de todo el planeta.
INDUSTRIA ENERGÉTICA
En relación al estado actual de la industria energética en Chile y el mundo, considerando la variable covid y sus proyecciones para el año 2021, ¿qué se puede esperar?
Al respecto Dusan Paredes, decano de la Facultad de Economía y Administración (FACEA) de la Universidad Católica del Norte (UCN), y PhD en Economía Aplicada de la Universidad de Illinois, señaló que “en el tema de la industria energética yo creo que la situación es compleja; porque, en mi opinión, es una industria que ha tenido dificultades digamos para poder instalarse con propiedad, primeramente por escasez de mano de obra calificada”.
Añadió que “son tipos de proyectos que generalmente enfrentan mucho cuestionamiento del punto de vista ambiental. Hay una institucionalidad muy fuerte detrás de la aprobación de estos proyectos. Entonces ese sector, es un sector emergente que ya venía complicado (…) Y, en términos de inversión y trabajo, indudablemente que yo creo que ha sido un desafío para ellos”.
En relación a lo que viene para este año 2021, el experto indicó que “el desafío es mayor aún”. Argumentó que “yo creo que indudablemente los efectos de la pandemia se van a visualizar con mayor fuerza este año; en el ámbito económico me refiero (…) La razón es muy simple: y es que el presupuesto público también tiene un límite. Gran parte de la situación que hemos visto hoy en día, ha estado suavizada por el gasto público”.
En este sentido, Paredes considera que –a su juicio- la opinión pública ha sido demasiado dura con el Gobierno, “porque es indudable que el gasto público ha mantenido la economía activa; y ese gasto público indudablemente que se va financiando con impuestos. Y cuando la gente comienza a perder sus puestos de trabajo, no paga impuestos. O cuando la gente aumenta su nivel de informalidad no paga impuestos. Entonces, pronto, yo creo que a nivel nacional las arcas fiscales van a sentir ese receso, y eso va a ser un desafío para prácticamente todos los sectores”.
ASPECTO GEOPOLÍTICOS
Otra arista sobre el mismo tema lo brinda la también académica de la UCN, Francis Espinoza, quien posee un PhD en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universidad de Birmingham.
Sobre el ‘balance covid 2020’ en el plano de la industria energética, la catedrática explicó que “dado la pandemia, la industria energética no se movió tanto hacia una ‘matriz verde’, o de hidrógeno verde, pues los recursos debieron estar puestos en suplir la crisis sanitaria y empezar todo el proceso de reactivación económica en el país”.
Por otro lado, agregó, “a nivel internacional; la menor demanda de petróleo impactó los mercados de intercambios del crudo, del gas natural y las energías renovables; alterando las actividades de transporte, industria y comercio (…) lo que se ha traducido en un menor crecimiento económico mundial y su impacto en el país, según las proyecciones de la Agencia Internacional de Energía (AIE)”.
Por otra parte, y desde el punto de vista geopolítico, Espinoza señaló que “las cartografías se están moviendo hacia ‘naciones estado’ que están prefiriendo energías limpias o menos contaminantes; pues dada la ‘paralización’ del mundo -que decretó The Economist en su portada el 21 de marzo de 2020-, el uso de petróleo para actividades humanas todavía está en suspensión, y países en vías de desarrollo como el nuestro deben apuntar a la corriente mundial de uso energético”.
LEY DE EFICIENCIA ENERGÉTICA DE CHILE
Sobre las proyecciones para este año 2021, la analista dijo que, a diferencia de otras áreas productivas, “el sector energético en el país comienza con muy buenos avances; dado que luego de más de dos años de tramitación en el Parlamento, se aprobó la primera Ley de Eficiencia Energética de Chile (…) promoviendo así el uso racional de los recursos energéticos, mejorando no sólo la productividad y la eficiencia económica, sino la calidad de vida de los ciudadanos”.
En el mismo ámbito, manifestó que se elaborará el Plan Nacional de Eficiencia Energética, “más allá del gobierno de turno porque es cada cinco años”. “Este plan abarca todo tipo de eficiencia energética residencial, de edificación, transporte, ciudades inteligentes, educación y sectores productivos”, expuso.
HIDRÓGENO COMO COMBUSTIBLE
La especialista hizo hincapié en que “un aspecto interesante de esta ley, es que declara al hidrógeno como combustible y se podrá normar y darle un uso como recurso energético (…) La empresa minera Antofagasta Minerals es pionera en el país en ingresar a la Asociación Chilena de Hidrógeno (H2 Chile) y convertir el rubro en minería verde, dado que el hidrógeno contribuye a la reducción de las emisiones de efecto invernadero que generan el uso de otros combustibles fósiles”.
Por otra parte, y concluyendo su alocución, Francis Espinoza indicó que “el Instituto del Litio era la esperanza para el país y la Segunda Región; dado que representa la inversión más grande que el Estado de Chile llevará a cabo en temas de transición energética, minería sostenible e hidrógeno verde (…) Es de esperar que se revise la decisión de Corfo para que las regiones del país sean grandes promotoras de una matriz energética verde y contribuyan a la tan anhelada descentralización del país”.
ACERA
Como es habitual en el tratamiento de estos temas por parte de ‘Norte y Energía’, siempre nos interesa incluir la visión de los gremios.
En este sentido, Carlos Finat, director ejecutivo de ACERA A.G. – Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento A.G., hizo un ‘balance covid’ de la producción energética de Chile 2020. “La industria, en general, mantuvo sin problemas la operación de sus instalaciones y aseguró el suministro eléctrico a todo el país”, indicó.
En el mismo ámbito, expresó que “los proyectos ERNC en construcción se mantuvieron -a pesar de las dificultades propias de la situación de pandemia (confinamiento, aduanas sanitarias, prácticas de seguridad especiales en faena, entre otras)-; sin consecuencias sobre los trabajadores (…) Pensamos que es una demostración de la gran resiliencia del sector y de su firme compromiso con el cumplimiento de los contratos”.
Sobre la proyección 2021 en la misma materia, Finat manifestó que “es difícil responder”, debido a que “la evolución de la pandemia es incierta”.
“De todas maneras, pensamos que la industria va a mantener su pujanza continuando con la construcción de los 5.000 MV para los próximos años. Muchos de esos proyectos están comprometidos con contratos de suministro de energía eléctrica a clientes regulados y no regulados, y todas las empresas han demostrado su compromiso con el cumplimiento de estos”, puntualizó.
SEREMI DE ENERGÍA
Evidentemente la visión de la autoridad tiene una importancia superlativa en este tipo de análisis. En relación a la temática abordada, el seremi de Energía región de Antofagasta, Aldo Erazo, indicó que “desde que comenzó la crisis sanitaria por covid-19, como Seremi de Energía hemos estado preocupados de resguardar que la energía llegue a los hogares de nuestra región; a las ciudades, al comercio, a la industria, hospitales (…) por esto hemos estado en permanente coordinación con las compañías; velando que la operación de las generadoras, la transmisión, el combustible y las empresas de distribución no sufran alteraciones producto de la pandemia”.
Sobre la operación y construcción de proyectos del ámbito energético, el personero explicó que “tomando las medidas sanitarias correspondientes -y planificando las acciones necesarias para no alterar significativamente el cronograma de trabajo original-, se mantendrá la operación y construcción de proyectos de energía sin grandes cambios”.
PROYECCIONES 2021
Por último, y en lo que refiere a las proyecciones 2021 de la industria energética, Erazo manifestó que “como ‘Seremia’ estamos velando que las empresas cumplan y refuercen permanentemente la obligatoriedad de cumplir con todas las instrucciones emitidas por el Ministerio de Salud, de manera que no altere la operación y/o construcción de obras energéticas”.
Añadió, finalmente, que “esperamos que durante el año 2021 y 2022 se inyecten 2.688 MWn de energía al Sistema Eléctrico Nacional. Para cumplir esta proyección, estamos trabajando en el marco del Plan + Energía, que consiste en apoyar a los titulares de proyectos de energía en el desarrollo de los proyectos, de manera de que se puedan construir en los plazos correspondiente y de forma armónica con las comunidades donde estarán insertos y de esta forma ir desarrollando una industria energética sostenible (…) De este modo, esperamos que la incorporación de fuentes de energía renovable a la matriz nacional no se vea afectada”.