La electro movilidad paulatinamente ha tomado importancia tanto a nivel internacional como nacional. En Chile, se espera que el transporte público y particular del futuro sea en su mayoría desarrollado por buses y automóviles que colaboren con el cuidado del medio ambiente. En este contexto es que se vuelve necesario profundizar en los conocimientos y herramientas que poseen los trabajadores y las trabajadoras chilenas en relación al campo automotriz y eléctrico.

Se estima que para el año 2046, Chile tendrá alrededor de 5 millones de vehículos eléctricos circulando por sus calles, junto con una red completa en el transporte público, motivo por el cual es urgente contar con capital humano especializado. En la actualidad existen pocos profesionales en el país con conocimiento en tecnología mecánica eléctrica, por lo que es vital comenzar prontamente  un proceso de entrenamiento y certificación en materia energética sustentable.

En tanto en la segunda región, diversos son los usos que tiene la energía solar, geotérmica y eólica. La energía solar es idónea para ser utilizada en puntos aislados y zonas rurales o de difícil acceso, por ello se han llevado a cabo proyectos de energía solar que benefician a las diversas comunidades de la región.  A ello se suma la creación de parques eólicos, utilización de energía geotérmica y fotovoltaica, esta última siendo la más utilizada en la región conocida como la zona con más radiación solar del mundo.

Cada vez son más empresas las que se suman al uso de energías renovables para su funcionamiento, producción y ejecución. FulcroABC empresa de Certificación de Competencias Laborales acreditada por ChileValora cuenta con una planta de energía fotovoltaica, siendo una de las únicas pymes del norte grande y de la región que cuenta con este tipo de energía, cuyo excedente se devuelve a la matriz energética de la red, con el fin de colaborar con la ciudadanía y generar consciencia de la viabilidad de la iniciativa. Además, la empresa decidió sumar a sus perfiles, especialistas en instalaciones y operaciones de plantas fotovoltaicas, debido a la importancia de certificar las competencias laborales de los trabajadores y trabajadoras en materia de energías renovables y así colaborar con el desarrollo sustentable.

Antofagasta es la capital de la energía del país, aportando con el 26% de la energía del Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Bajo este contexto, la conformación del escenario energético ha cambiado ya que desde el año 2014 a la fecha, la capacidad instalada creció un 52% y la matriz se ha diversificado, pasando de una en la que primaban las fuentes fósiles a una que ha incorporado fuentes de energías renovables no convencionales (ERNC).

La ruta energética 2018 – 2022 que define las prioridades en materia energética a nivel país, centra su interés en el desarrollo sostenible, y proyecta planes de acción para distintas localidades. Fue construida a través de un proceso participativo con 2.200 personas de las 15 capitales regionales del país, y cuenta con siete ejes estratégicos: modernización energética, energía con sello social, desarrollo energético, energía baja en emisiones, transporte sustentable, eficiencia energética, y educación y capacitación energética. En la Región de Antofagasta el foco está puesto en el entrenamiento y certificación de las competencias del capital humano con la finalidad de potenciar el conocimiento en materia de energías renovables en la comunidad educativa y laboral para que, en un futuro no muy lejano, la región cuente con personas con las competencias suficientes para trabajar y potenciar el uso de energías renovables en el día a día.